El Atlético Valladolid se está asentando en Liga Asobal. Tras un complicado comienzo con cuatro partidos en dos semanas y las crueles derrotas en los instantes finales, el equipo entrenado por Nacho González ha cogido aire con una meritoria victoria ante Ciudad Encantada de Cuenca, en un partido en el que supieron aprovechar con eficacia sus mejores minutos para crear diferencias en el marcador en los instantes clave.
Dani Dujshebaev comenzó liderando el ataque local, con dos goles consecutivos que otorgaron la primera ventaja significativa, 10-7, que tras 20 minutos de juego rompía la tendencia de marcadores igualados. La brecha se abrió en el electrónico y sobre el 40×20 de manera insalvable, con el conjunto vallisoletano lanzado en ataque y aprovechando al máximo cada fallo o descuido de la defensa visitante para marcar al contraataque.
El gran trabajo de Javi Díaz en la portería facilitó que la renta creciera en los últimos minutos de la primera parte, 13-8 primero y 14-9 finalmente al descanso, con la sensación en la grada de Huerta del Rey de que el tercer triunfo de la temporada no se podía escapar.
Cuenca comenzó la segunda mitad con energías renovadas, conscientes de la obligación de volver a tener opciones en el partido lo antes posible. Sin embargo, tres goles de Gonzalo Viscovich desde el extremo aprovechando la gran circulación de balón con Diego Camino al mando permitieron no sólo mantener sino aumentar la ventaja, 22-14 tras 13 minutos de la segunda mitad.
Aún en inferioridad el Atlético Valladolid consiguió marcar e impedir así no sólo que Cuenca tomara resuello en el partido sino dejar claro que Huerta del Rey se volvía a acercar a la imagen de fortín de las dos campañas anteriores en Plata. César sustituyó a Javi bajo palos para detener un penalti y hacer que estallara una afición entregada a un equipo que siempre responde hasta el último aliento.
En los últimos minutos, con los visitantes entregados a la superioridad local, los jugadores del Atlético Valladolid se dedicaron a dosificar la cómoda renta y aumentar la dosis goleadora, con un Serdio especialmente contundente en esta parcela, con nueve goles y unos porcentajes excelsos. Nueve jugadores del equipo acabaron marcando en un nuevo recital ofensivo y coral que deja al Atlético Valladolid en la zona media de la clasificación.
